lunes, 24 de enero de 2011

Patas cortas...

Escuchen a Biolcatti hablar del mal momento que pasa el campo por pura y exclusiva responsabilidad de la gestión de CFK, por favor, háganlo, reflexionen y cuéntenme luego todo el asco, la indignación, que les dio.
Acá les dejo el link de la charla con Alfredo Zaiat: http://chequeenblanco.fmrockandpop.com/2009/08/11/entrevista-zaiat-a-biolcatti/
Y como dicen el Indio y un bloggero amigo: este asunto está ahora y para siempre en tus manos, nene... no digas que no té avisé.

miércoles, 12 de enero de 2011

Soy un circo

- Damas y caballeros... ¡Música, maestro!
Soy un payaso que no pintó Picasso
y Sarrasani y el Gran Thiany ¡jamás vieron!
No tengo traje de volados, ni rataplán ni galerita
ni botonazos de fulgurante ni regadera.
Sé sólo un chiste mediocre
y mejor no lo supiera: mi vida.

Soy un payaso y si hace falta
soy el oso, el tony, el pony,
el acomodador, el director de pista,
el dentista del elefante y el tragafuegos.
¿Por qué soy un circo entero?
Porque vos estás tan triste,
amigo del alma. Oí...

Soy un circo, hermano mío, soy un circo,
secá tu llanto en la melena del león,
después vestite con mi frac de pajaritos
que el Quijote y Buster Keaton
nos esperan en el hall.

En mi circo todo está color relincho,
colgá en los cuernos de la luna tu rencor,
si un gran bolsillo de payaso es el destino
vos entrá, que yo te pinto
de aspirina el machucón.

También la ternura de un bello fracaso
redime en la tragedia griega de vivir.
Como un revolcón de fiera rota
sufre aquel que más amó
y lo revive el propio amor ¡para insistir!

Qué serio me puse, ¡payaso y plomazo!
Se encienden las luces, vení por aquí,
que ya están sentados nuestros invitados
mientras la bandita los recibe así.

En aquel palco con pinta fina
pero un poco presumidos,
distingo a tus perdones,
¿usan cornetillas para sordos, no es cierto?,
porque perdonan, pero no olvidan.
Veo a tu soledad en la platea.
Tus culpas no han llegado ¿o no tenés?
Y acaban de llenar los tablones de la popular
tus buenos recuerdos, tus lindos amores,
tal vez les des mejores ubicaciones
para las próximas funciones. Tal vez.
Soy un circo, hermano mío, soy un circo,
se va la noche con su capa de satén
sembrando un mágico alboroto de cariños
al notar que has sonreído
con un poco de niñez.

Y, al final, cuando mi circo esté vacío
la muerte hará su viejo número sin red,
vos temblarás por el milagro de estar vivo,
con el alma en equilibrio
sobre un lirio de papel.

Y ahora que estás de esperanza
y arriba del trapecio danza
la aurora niña,
¡nada por aquí, nada por allá!

De pito y voltereta
mi circo ya se va,
con sueños de poeta
y el canto fraternal.

Adiós, adiós, hermano mío,
adiós, mi circo ya se va,
mi circo ya se va.
Mi circo ¡ya se fue!


Horacio Ferrer

Muchacha Azul, Princesa Americana

Y allá a lo lejos entre vos y el cielo
la hidrográfica senda del huichayra
pupila del ocaso interminable
sueño indio sepulcro de la raza
desde la noche oscura del incario
hasta el alba naciente del mañana
custodiaran el sol de tus umbrales
los añascos cardones del pucara
matriz del viento origen de la sombra
ofertorio otoñal de las calandrias
duerme la siesta del maíz fecundo
sobre el tálamo gris de tus pisadas
hasta que el hombre de la mano ruda
abran en surcos la paz de tus entrañas
abre tus brazos al rosal latino
no levantes ni cercos ni murallas
que tus mollares le den sombra y abrigo
al criollo, al europeo y al aimara
y que lleven tu nombre por el mundo
muchacha azul, princesa americana
cuando el verano te devuelva al rio
y las noches se enciendan de guitarras
un cortejo de grillos escondidos
prenderán de tu nombre un pentagrama
y desde el verde verán pasar nocturno
junto al anfibio entonaran tu nombre
Tilcara.

Germán Walter “El Churchi” Choquevilca

No sé...

En mi impotencia por compartir con vos todo lo que nos era imposible compartir, te hablé muchas veces de mi vida. Vos me oías sin escucharme, sin impaciencia sin embargo, y nunca conseguí adivinar si te aburrías. Por el contrario yo me precipitaba sobre cada gesto, cada vaga palabra tuya que pudiera informarme algo acerca de tu vida, de tus gustos, de tu his­toria. Conocer, por ejemplo, que siempre, desde muy joven odiabas todo lo que fuese de color negro, fue un dato abrumador. Cada vez que elegía un regalo para vos, y he elegido muchos, esa confesión me obligaba a reflexionar sobre tu personalidad, mis obsequios estaban siempre disfrazados de elecciones tuyas. Me era muy sencillo agasajarte con­ libros, discos, películas y hasta un buen vino, malbec por supuesto, pero a veces necesitaba hacerte un regalo que me llevara con vos. Me decidía, entonces, por un sueter, un cinturón, un reloj o una camisa, con la ferviente esperanza de que notaras con cuánta intensidad desdeñaba el negro.

Te hablé muchas veces de mí, pero las pa­labras imponen límites y la experiencia no se enseña. En todo momento anhelaba, con ese tipo extraño de nostalgia de lo que no nos es posible, que hubieras participado en los intrincados juegos que mi vida propuso, y en los que nadie ha ganado, para entender ciertas estructuras de la realidad que el lenguaje no puede imitar. Te hablé demasiado, era lógico que las heridas que la vida ha operado en mí aguzara tu curiosidad y con tu cabeza sobre mi hombro y una media sonrisa distraída, me escuchabas mucho más y mucho mejor de lo que nunca me atreví a desear.

domingo, 9 de enero de 2011

Fue amor

Yo podría haberlo hecho mejor
vos podrías acercarte a mi
yo intuía que esto, mi amor
se rompía y esto es siempre así.

La verdad es que todo fue
tan extraño, tan extraño al fin.
Vos buscando el polvo de Dios
yo bebía para irme de aquí.

Cada vez que pienso en vos fue amor, fue amor...
Cada vez que pienso en vos fue amor, fue amor...

Todo el mundo me habla de vos
y no puedo dejar de reir
lo que haces y a donde vas
de tu depto siempre a Prix D'Ami.

No está bien romper un corazón
deja vú de lo que va a venir
vos querías verme feliz,
yo quería verte revivir.

Cada vez que pienso en vos fue amor, fue amor...

Estos días que corren, mi amor
es aquí que nos tocó vivir
enredados en los cables de Entel
de algún sueño vamos a salir.

Como siempre vuelvo a ensayar
y los pibes siempre están ahí
hay un boomerang en la city, mi amor
todo vuelve, como vos decís.

Cada vez que pienso en vos fue amor, fue amor...


Rodolfo Páez

jueves, 6 de enero de 2011

Esplicasiones de una Señora que sescapa con otro

Negro: te pido por fabor de que no tomés a mal que yo agarre mis prendas de vestir y me vaya del cotorro, ni que pensés de mí con lijeresa, aplicándome tal o cual metáfora dibna de mejor suerte… ¡Te juro que me voy para tu bien, negrO, y que algún día vas a comprender todo el tremendo sacrificio que hago para que triunfés con tu concomitansia de poetA y de conpositor de música, todo lo cual hoy andás bastante flojo y sin poder encontrar un tema para un gran tango que te haga venir popular y honbre de plata!

No te vayás a pensar de que te dejo porque a tu reina una pobresa insuperable, y que si una sigue vibiendo acá a la larga se acostrumbraría a comer el reboque de la paré… ¡queesperansa! Me voy, negrO, para ver si al encontrarte solo, triste y abandonado, sin dada más que la guitarra y el perrito companiero que por mi ausensia no comería, te sentás a escribir un presioso tango, en el cual me tratés de todo, diciéndome que soy uan ingrata malbada, una percanta trasionera o lo que a vos te guste, que no me voy a ofender por eso.

Todavía, si querés más datos para tu composisión, te comunico que al escaparme del bulíN me voy con un cabaliero que conosí el otro día en el sentrO, el cual de me asercó cuando yo estaba mirando una vidriera, y me dijo: “Usté merecería un tapado de bisontE y un coliar de brillantes, sinpática…”, a lo cual yo le contesté: “¿Le parese?...” y como una palabra saca la otro y las 2 laban la cara, a la final quedamos que yo me iría a vibir con él, que me tratará como una reinA, y hasta prometió de comprarme una licuadora para que yo pueda haser jugo en mis horas de ósio… ¿Te das cuenta qué cambio?

¡Adiós negrO, no mechés la culpa de nada y pensá que todo lo hago para que triunfés con una cansión en contra mía… ¡Ha, y apurate que te van a desalojar antes del 30!


Se despide de vos, tu tierna conpaniera quescapás de haser cualquier cosa parayudarte, Camila (haora gladiS”).

César Bruto (o Napoleón Verdadero o Uno Cualquiera o José Spadavecchia)... un genio.
  

sábado, 1 de enero de 2011

Tal vez no importe tanto

Tal vez no importe tanto,
tu cara se borra sola.
Hay muchas caras en mi vida
que viven borradas
quién sabe hasta cuándo.
Se han borrado poco a poco,
pero en el momento menos esperado,
y a veces en el menos indicado,
vuelven a aparecer por un brevísimo instante
para sumergirse enseguida
en el “¿dónde estarás ahora?”
con un intenso sobresalto
de mi parte…
Hay días mucho más chicos que otros.
Y hay días muertos,
descolgados,
inútiles,
días que crecen y mueren sin esperanza.
El rostro borrado aparece de pronto
y es, al mismo tiempo, el mismo
y otro,
siempre dispuesto a borrarse
para aparecer otra vez
pero, ¿cuándo?
La música corre como el agua
pero se borra en el aire.
Es difícil acordarse del invierno
en verano
y del verano en invierno,
evocar una melodía remota
a la deriva en el tiempo pasado.
Es difícil salvar del olvido
un rostro, una cara
que se ha borrado
y que aparece
el día y el momento menos pensado.
Si uno pudiera manejar la cosa,
es decir matar definitivamente ese rostro en la memoria,
o evocarlo a voluntad,
todo sería distinto.
El vientito del despecho
ha lijado los relieves,
los límites de la superficie recortada,
de los diferentes rostros de Ella.
Uno se salva de a ratos
pero en el momento inesperado…
Ella aparece con un rostro olvidado
que enseguida desaparece, etc. etc.
La cara, el recorte amoroso…
mas no el cuerpo
(el cuerpo decapitado
del rostro borrado).
Tal es el trabajo de salvación
por el momento:
evocar a voluntad
o borrar para siempre.
Incluso borrar el recuerdo
de haber borrado un rostro,
o todos los sucesivos rostros de Ella.
Cuando un rostro comienza a borrarse
(y por lo visto estoy diciendo rostro y no cara
porque rostro tiene más relieve que cara)
ojo, me digo, porque si los ojos de Ella se borran
algo comienza a terminarse
o algo, también, comienza a secas.
Es el comienzo de un nuevo rostro
que tal vez se borrará a su turno
y así sucesivamente.
Y lo de los rostros también se extiende a los lugares
que permanecen borrados
para reaparecer un instante de cualquier día,
no elegido,
y todos los días hay instantes que nacen y mueren vacíos.

Ricardo Zelarayán (21/10/1922 - 30/12/2010)